La vida es hermosa. Tal vez los humanos no tanto, pero algunos tenemos esta debilidad por apreciar y disfrutar todo lo que sucede en la vida, las cosas buenas y las cosas malas, disfrutamos y agradecemos todo. Es una experiencia maravillosa estar vivo, y vivir la vida con todos sus matices, las emociones altas y las bajas, con todas sus combinaciones de colores, es lo mejor que podemos tener.
Después de 10 años me reiré de las cosas malas que he vivido, o me arrepentiré de no haber disfrutado las oportunidades que eran buenas, entonces antes de que pasen esos 10 años elijo vivir hoy al máximo.
Cada día es un regalo, y disfruto todo lo que trae el día, este es el único día, no hay otro igual y es el único día que tengo para vivir, ayer ya pasó y falta mucho para que llegue mañana.
Cuando hablo de esto con otras personas, algunas me dicen «estás loco», me parece interesante y me da mucha curiosidad, además en esos casos siempre recuerdo una frase de Lewis Carroll que dice «Usted conoce cuerdos felices?».
Entonces lo mejor será bailar al ritmo de la vida, a la orilla del mar en un atardecer, o bajo la luna y un manto de estrellas, hoy, mañana, por siempre y hasta el fin.
Si tengo que dejar algo escrito antes de irme, estas palabras lo dicen todo, línea por línea. Es mi esencia, es quien soy y lo que siento, sin poses y sin máscaras, y cómo negar lo que siento, sería traicionarme y engañarme, y tener una postura que no va con apreciar lo que la vida ofrece.
¿Qué pasará en la siguiente hora? No tengo la más mínima idea, solo sé que este presente es lo único que tengo y es increíble, y de muchas formas mágicas, coincidencias en las que по creo y que no tienen explicación, los pequeños detalles mágicos siempre están presentes si te dedicas disfrutar la vida como es.
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