Cuenta tu propia historia una y otra vez

Tu historia define quien has sido, los desafíos que has superado y lo que eres capaz de hacer el día de mañana.

Para que tengas control sobre todo lo que puedes hacer es mejor que sepas contar tu propia historia. Muchas veces lo que sucede es que disminuimos lo que hemos logrado y no resaltamos muchos de los logros obtenidos.

Demasiada humildad. Ojo, ser sencillo es bueno, lo mismo ser humilde, pero no al extremo. Es bueno reconocer lo que has logrado y quién mejor que tú para contar tu propia historia.

A veces tienes que pensar como una tercera persona, no como tú eres, sino como un amigo, un buen amigo que te conoce y que va a contar con lujo de detalle todo lo que has hecho.

En ese momento es mucho más fácil contar tu historia y reforzar ciertos puntos que en otro momento hubieran pasado totalmente desapercibidos.

Quién mejor que tú para contar tu historia.

Comienza ahora y te vas a dar cuenta lo fácil que es.