Tu cliente no va a comprar tu producto porque tienes una «visión» y «misión» romántica y bien redactada publicada en la entrada de tu empresa, tu cliente va a hacer negocios porque entiende que tu producto o servicio cumple una promesa que no toma más de cinco palabras en muchos casos.
Por ejemplo anteriormente cuando uno iba a comprar un teléfono celular Nokia tenía en mente «fuerte y resistente» o «aguantan de todo». Esas palabras es lo que veíamos en los antiguos teléfonos de Nokia, eso es lo que esperábamos tener y por eso pagábamos.
¿Qué es lo que ofrece tu empresa?
¿Qué experiencia ofrece tu producto?
Y ese mensaje lo debes tener claro, tú y todas las personas que trabajan contigo.
Eso es lo que mueve al cliente a hacer negocios contigo.