«Soy emprendedor» es una frase que está de moda, algunos la usan para sentirse identificados, otros hacen emprendimiento y no dicen que son «emprendedores».
Hay un reto en ser un emprendedor y es entender que puedes fallar y que inmediatamente tienes la oportunidad de aprender y levantarte para hacerlo mejor.
Conozco a muchas personas que emprenden una actividad por un tiempo, dos o tres meses, no consiguen lo que quieren, luego cambian, tres o cinco meses en otra idea, pierden dinero, no consiguen lo que quieren, vuelven a cambiar, ahora es otra actividad, diferente a las demás, dos o tres meses, pierden dinero, no consiguen lo que quieren, es tiempo de cambiar una vez más.
Así hay muchas personas, quieren dinero rápido, resultados enlatados con una fórmula mágica que algún comerciante de espejos y fantasías les vendió. ¿Cuántas veces tienes que cambiar de actividad para que te des cuenta que el éxito está en el largo plazo?