La felicidad es un estado presente

La felicidad no es una meta, no es un objetivo, no es el final del camino.

La felicidad es el estado en el que debes vivir todos los días y no debes provocar situaciones que amenacen tu felicidad.

Por supuesto que hay momentos tristes y dolorosos, tú decides cuánto tiempo duran esos momentos.

Lo más importante es que hagas los momentos felices más intensos y frecuentes.

¿De otra forma cómo vas a disfrutar todo lo maravilloso que hay en la vida?