La suerte no existe

Desde cierto punto de vista es así. No puedes dejar la responsabilidad de tus éxitos o fracasos a la suerte. Eres tú quien consigue las cosas buenas y las cosas malas. Eres tú quien obtiene esos resultados.

No culpes a la suerte. Esta es una válvula de escape que la utilizan las personas que son inmaduras en su forma de actuar. Todo lo bueno es porque se lo merecen y todo lo malo es por un castigo que debe recibir o porque también se lo merecen.

Es un resultado, si cambias la palabra «suertes» por «resultado» lo vas a entender mejor, sobretodo cuando alguien dice «tienes buena suerte» tradúcelo por «tienes buenos resultados» y te vas a dar cuenta de lo que quiere decir.